Escribo en el instante previo a montarme en un coche con dirección a Ribadesella, Asturias, la zona franca del norte en este gran rebrote de coronavirus (buena noticia que puede cambiar antes de que pronuncie las siglas COVID-19). Habrá quien piense que los detalles de mis vacaciones carecen de interés y otros que cometo una imprudencia supina exponiendo a los pobres riosellanos al "virus madrileño", que ahora parece doblemente virus por lo epidemiológico y lo invasor. Pero yo sola ya me siento lo bastante hipócrita por ...